A mí las lunas de julio me transcurren un poco así, un poco bailando, un tanto bebiendo. Me da por sonreír, un poco por soñar. ¡Qué callejón de olores y de abrazos, de esperanzas y de flores por venir! ¡Qué alegría para repartir a pesar de que lo que aumenta es la impaciencia, lo que no disminuye es el pasado, lo que no llega es un prometedor futuro! ¡Pero qué descarada insolencia la nuestra de celebrar siendo el centro, un poco, de la vida de uno mismo! Quizá sólo faltan esas historias que prometía apenas hace un año, cuando todo se veía a lo lejos.
4 Escrúpulos y jaculatorias.:
Qué alegría seguir a pesar de todo! Qué alegría festejar con usted... le deseo muchos Julios como este!
Bueno bueno, me encantó el pie de foto. La foto también. Es bonito ver sonreír a alguien así como si fuera el centro de su vida misma!! Genial, pero faltan ciertamente faltan esas historias.
Por cierto ¡Felicidades!!!
Besitos.
El único heroismo es sobrevivir, José Antonio. Muchos julios más.
Carmen,
A sonreír tanto como se quiera-pueda. Las historias llegarán.
Abrazote
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